¿Qué es un Equipo de Protección Individual (EPI)?

Cualquier equipo destinado a ser llevado o sujetado por el trabajador para que le proteja de uno o varios riesgos que puedan amenazar su seguridad o su salud, así como cualquier complemento o accesorio destinado a tal fin.

Los más comúnmente utilizados son para la protección de la cabeza (cascos), de los oídos (tapones, orejeras…), de los ojos y la cara (gafas de seguridad, pantallas…), de las vías respiratorias (máscaras, mascarillas…), contra caídas de altura (cinturones, arneses de seguridad…), de manos y brazos (guantes de seguridad), de pies y piernas (calzado de seguridad), del resto del cuerpo (petos, mandiles, trajes aislantes…).

 

¿Y cómo se clasifican los EPIs?

Pues según la gravedad del riesgo, podemos clasificar los EPIs en tres grupos:

 

CATEGORÍA I: Son los equipos de diseño sencillo destinados a proteger contra riesgos mínimos (por ejemplo, guantes de jardinería o de limpieza, cascos ligeros, gafas de sol…).

En este caso, el fabricante puede certificar directamente el cumplimiento de las Exigencias Esenciales de Salud y Seguridad (EESS), y estampará la marca CE que significa que el equipo es conforme con dichas exigencias.

 

CATEGORÍA II: Son los equipos de diseño medio que proporcionan una protección de grado medio más alta que los de categoría tipo I, pero que no están diseñados para proteger de riesgos mortales o irreversibles (aquí encajan muchos tipos de calzado de seguridad).

En este caso, previamente a su comercialización, el fabricante debe someter el equipo a un “examen CE de tipo”, que realizará un organismo con competencia en la materia. Si el producto supera este examen de cumplimiento de las EESS, se le estampará la marca CE.

 

CATEGORÍA III: Son los equipos de diseño complejo que protegen de peligro mortal o que afecte grave e irreversiblemente a la salud del usuario (por ejemplo, los equipos de protección respiratoria filtrantes que protegen de gases tóxicos, los equipos destinados a proteger contra las caídas desde determinada altura, o los equipos contra riesgos eléctricos o de alta tensión).

En este caso, además de someter el equipo a la superación del examen CE de tipo, también debe someterse anualmente a un procedimiento de control de aseguramiento de la calidad de producción.