Todo calzado de seguridad debe incorporar en su interior un tope o puntera de protección, de modo que al recibir un impacto, este refuerzo proteja los dedos de los pies evitando su aplastamiento.

Grosso modo estas punteras anti-impactos pueden ser de tres materiales diferentes:

• Acero.
• Aluminio.
• No metálicas fabricadas en base a composites.

Cualquiera de estos tres materiales puede ofrecer suficiente protección para los dedos de los pies contra golpes y aplastamientos. Pero, ¿cuál de ellos es el mejor? Pues todos tienen sus pros y sus contras, por lo que no hay una única respuesta correcta. A la postre, el material de puntera de seguridad más adecuado dependerá del tipo de trabajo que hagas (de los riesgos propios de tu entorno laboral), así como de tus gustos y preferencias personales.

Punteras de acero

Hasta hace poco las punteras de protección más habituales.

VENTAJAS: Se trata de un material muy resistente a los impactos o perforaciones, por lo que ofrece una protección fiable. Además es económico.

INCONVENIENTES: Las punteras de acero son pesadas, corrosivas (se oxidan con el uso y la humedad), con un pobre aislamiento térmico (el metal es un conductor de calor y frío), pueden ser incómodas (con espacio reducido para los dedos de los pies) y un incordio si en tu lugar de trabajo se utiliza un detector de metales.

Punteras de protección de acero

Punteras de aluminio

Son las punteras de protección más utilizadas en el calzado de seguridad.

VENTAJAS: Igual de resistente a los impactos que las punteras de acero pero con la ventaja de que son un 30-50% más ligeras, son más cómodas (al ser un material más delgado que el acero ofrece más espacio para los dedos), no acumulan calor, y son resistentes a la corrosión.

INCONVENIENTES: Más caras que las punteras de acero. Y al igual que el acero será detectado por el arco de metales.

Punteras de protección de aluminio

Punteras no metálicas

Actualmente, y cada vez más, en el calzado de seguridad se están imponiendo las punteras de protección metal free fabricadas en base a composites (mezcla sintética de dos o más componentes, de forma que las propiedades del material final son superiores a las de los componentes por separado). Pueden estar hechas de fibra de vidrio, fibra de carbono, Kevlar o plástico.

VENTAJAS: Son las más ligeras, flexibles y cómodas, tienen un mayor aislamiento térmico (no son conductoras del calor o del frío), son resistentes a la corrosión (no hay riesgo de oxidación), antiestáticas (sin electricidad estática) y amagnéticas (no se detectan en arcos de detección de metales). Por añadidura, recuperan su forma tras el impacto (este tipo de material no aplasta el pie, con lo que se facilita su salida).

INCONVENIENTES: Aunque pasan los estándares de seguridad, no ofrecen tan buena protección contra impactos como las punteras metálicas, son más vulnerables a los ácidos, y pueden perder su nivel de protección después de un aplastamiento. Además, tienen un coste de fabricación ligeramente superior, con lo que su precio de venta suele ser también algo superior.

Punteras de protección de composite

Para terminar, simplemente decir que en nuestras tiendas de COSTA OESTE ofrecemos un amplio surtido de calzado de seguridad con punteras de acero, aluminio y no metálicas.

En el siguiente vídeo puedes ver el test de impacto que hace la prestigiosa marca Cofra con sus punteras de composite: